¿Cómo se deben separar los residuos?

Una de nuestras obligaciones principales como ciudadanos es separar los residuos de acuerdo a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de Residuos y su reglamento. Aquí te explicamos de manera sencilla cómo separarla para contribuir a la minimización de residuos sólidos y a la dignificación del trabajo del personal de limpieza y recolección de basura.

En la Ciudad de México se generan alrededor de 13 mil toneladas de residuos al día, los cuales deben almacenarse, recolectarse y pasar por un tratamiento especial para que se logre una disposición adecuada de los mismos. Todas estas acciones representan un proceso que toma bastante tiempo, es por esto que es muy importante estar informados y que nos responsabilicemos del correcto manejo de nuestros desechos.

Hasta el 2019, la CDMX contaba con 12 estaciones de transferencia de residuos, las cuales se encargan de almacenarlos y clasificarlos para que posteriormente sean enviados a distintas plantas de tratamiento si son residuos con potencial de aprovechamiento o a sitios de disposición final, que se encuentran a las afueras de la ciudad.

Esencialmente, los residuos se clasifican en 4 grupos:

1. Orgánicos. Abarca restos de comida y jardinería los cuales son compostables. Ejemplo: huesos, cascarón de huevo, restos de verduras, hortalizas y frutas, hojarascas y ramas, restos de café y té, incluidos sus filtros de papel. Lo mejor que se puede hacer con ellos es una composta casera, con la que podrás obtener abono para el jardín o lo podrás vender a ciertas empresas.
   
2. Inorgánicos reciclables. Están compuestos de materiales que pueden usarse para producir nuevos artículos como son el vidrio, metal, plástico, papel y cartón, ropa y textiles y envases tetrapack.
   
3. Inorgánicos no reciclables. Son residuos difíciles de reciclar por su composición. Colillas de cigarro, toallas sanitarias, bolsas de frituras, curitas y calzado son algunos ejemplos. Las pilas también entran en este grupo, sin embargo, es importante llevarlas a un centro especializado de desecho ya que contienen materiales muy tóxicos, pero cuando son dispuestas correctamente pueden aprovecharse hasta el 90% de sus componentes.
   
   
   
4. Manejo especial. Son residuos domésticos de gran tamaño y abarcan tecnológicos, electrodomésticos y mobiliario. Aunque se puede reciclar en ocasiones hasta el 100% de los mismos, es importante no dejarlos botados en las calles, si no que buscar un centro de acopio o investigar en tu alcaldía o municipio en dónde podrían disponer de los mismos.

Para facilitar el proceso y aprender cómo separar los residuos, te recomendamos colgar varias bolsas de plástico en un espacio de tu cocina y ponerles una etiqueta para denominarlos. Un buen tip es colocar una nota en el refrigerador con la clasificación y ejemplos de cada grupo por si a algún miembro de la familia se le olvida.

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Todos los envases que desechemos en nuestra basura orgánica deben de estar enjuagados y secos. Esto te beneficiará ya que evitarás malos olores en tu basurero y la persona que se encarga de separarlos te lo agradecerá. Además de que te darás cuenta de que muchos de ellos los puedes reutilizar varias veces antes de desecharlos por completo.

Finalmente, y a raíz de la crisis sanitaria generada por el COVID-19 recientemente se han difundido medidas para separar correctamente los residuos sanitarios. Dentro de estos residuos se incluyen cubrebocas, guantes, pañuelos desechables, chicles, cepillos dentales, cigarros, envases de medicamentos, jeringas, apósitos y gasas y no son reciclables.

Para una correcta disposición de los mismos se debe ocupar una bolsa por separado y colocar la leyenda “residuos sanitarios” con un marcador permanente. De ser posible, hay que rociarlos con una solución de agua clorada a 400ppm o 10ml de cloro comercial por cada litro de agua antes de entregarlos al camión o a la persona que recolecta la basura.

La Ley de Residuos Sólidos y su Reglamento, por razones de salubridad e higiene, permite el uso de bolsas de plástico para el manejo de residuos sanitarios. Durante la contingencia sanitaria COVID-19, puede usarse cualquier tipo de bolsa plástica para contener estos residuos. Sin embargo, se recomienda a la población usar las bolsas que ya tengan en sus casas o, de ser posible, comprar las que sean amigables con el ambiente, como las que están hechas de material reciclado o se identifican como compostables.

Mediante esta agrupación y disposición de residuos, se busca generar una cultura ambiental que favorezca las acciones de la ciudadanía hacia el cuidado del medio ambiente. La SEDEMA desarrolla diversos programas y campañas relacionados con el manejo integrar de los residuos sólidos, entre los que destaca el Reciclatrón, enfocado en los residuos eléctricos y electrónicos (REE); el mercado del trueque, que fomenta el reciclaje mediante un sistema de comercio justo y consumo local; y la campaña de Basura Cero, que entre sus principales objetivos tiene la reducción de plásticos de un solo uso.

Todas estas acciones que tomaron en conjunto el gobierno y ciudadanía, contribuyen a la reducción y reúso de los materiales que consumimos todos los días. Es una responsabilidad compartida entre comercio y establecimientos mercantiles y la investigación científica y tecnológica para el aprovechamiento y la valorización de los residuos. Aunque el principal componente para la realización exitosa de este programa somos todos nosotros. Súmate y contribuye a generar menos residuos tomando un momento de tu día para concientizar cómo puedes evitar generarlos e invirtiendo tiempo en la correcta separación de los que generes.