A pesar de que nuestro planeta se compone en su mayoría de agua; solo el 3% de ésta es dulce y potable.

Reciclar, reutilizar y reducir deberían ser hábitos comunes en la organización de muchos lugares de nuestro entorno, más aún si se trata de cuidar y preservar un recurso tan preciado como lo es el agua. Este bien es no renovable y, en futuro, habrá una reducción del 40%  de líquido, un pronóstico alarmante sobre la cantidad y calidad que tendremos…